
¿Qué podría pasar?
¿Van a crujirles por no ser SAD?The Penis attack escribió:Por cierto, lo de no ser SAD también va a crujir a Madrid y Barça.
Miguel Zorío[...]Seguramente no contaba con los servicios jurídicos de Meriton. Esta vez se han cansado. Los chinos, como Zorío los describió, se han cansado. Son pacientes pero no tontos y saben que lo de la semana pasada ha superado todos los límites. Les han acusado de cosas muy graves y quieren limpiar su imagen haciendo pagar al accionista con la ley. Están preparando una demanda contundente y que haga a más de uno empezar a tratar con más respeto a 'los chinos'.
Pues parece ser que sí.Sagan escribió:Será verdad?
"Miguel Zorío tiene memoria selectiva del club y de sí mismo. La historia sobre que yo estoy robando mi propio dinero es entretenida pero absurda. Va a tener que rendir cuentas sobre lo que ha dicho", manifestó el propietario del Valencia.
No es una cuestión de seriedad, si no de legislación y que derecho privilegia esa legislación, si la libertad de información o expresión, o bien el derecho al honor, intimidad y propia imagen, ahí hay una zona de conflicto entre ambos que en unos países está mejor resuelto que en otros.lFran escribió:Me parece de puta madre. Están acostumbrados a la impunidad y eso en países serios no pasa.
Meterle mano a un periodista por las cosas que dice es tan difícil como que Rodrigo se vaya de alguien y meta un gol.The Penis attack escribió:Que haga eso con 2 o 3 más (a cierto cierto locutor que lleva meses insinuando que salen camiones de dinero del Valencia rumbo a Singapur) y niquelao.
Hombre, algún "periodista" de la prensa amarilla le han metido mano por declaraciones que ha hecho. Y estamos hablando de declaraciones sobre la vida privada de alguien, aquí estamos hablando que están acusando de delitos o casi a una persona.cyber escribió: Meterle mano a un periodista por las cosas que dice es tan difícil como que Rodrigo se vaya de alguien y meta un gol.
Ni cando le acusas veladamente a alguien de cometer un delito?cyber escribió: Meterle mano a un periodista por las cosas que dice es tan difícil como que Rodrigo se vaya de alguien y meta un gol.