SENTIMENT CHE

franvinya escribió:¿ A nadie le resulta sospechoso que en todas las tertulias sean la vieja guardia casposa del Valencia o los contertulios del Levante, madridistas, culés, etc. los que defienden a Bankia y Cerberús ?.

Y lo pregunto especialmente a los que en este foro dais por bueno al fondo buitre.

hastings escribió: Una cosa es dar por bueno, y otra no demonizar como haces tú.

P.D:. Te ha faltado añadir que comen niños y atropellan abuelas. Que barbaridad, que manera de repartir carnets de valencianista.

Mario Alberto escribió:Si le cortas la lengua a un hombre no demuestras que está mintiendo, demuestras que no quieres que el mundo oiga lo que pueda decir.

CHEJOV escribió: Y si le cortas la poya no quieres que folle.

tronecillillon escribió: ¿De Camboya?

franvinya escribió: Grande Trone siempre con la caña preparada, las remata todas.

Desmemoriats y Josep Lizondo en Plaza deportiva escribió:Nadie nos dijo que el futuro sería esto

En pleno corazón del Ullevi, imaginamos un futuro feliz al contar con un VCF que lo tenía todo al alcance de su mano para dar el gran salto y convertirse en una potencia universal. Pero nadie nos advirtió de que el futuro sería esto, ruina, politiqueo, sentimientos de alquiler...

Ver a Vicente Vallés encaramado al monumento de la afición dirigiéndose al público allí presente con soflamas del nivel "si metiera todo el mundo 3000 euros a plazo fijo en el VCF el club no se vendía" te lleva a preguntarte cómo demonios hemos llegado a esto; porque allá donde mires ves al VCF rodeado de salvapatrias, de iluminados con ínfulas de una bajeza inversamente proporcional a la sorprendente potencia del altavoz por el que braman; y a aprovechados, que sólo buscan su propio interés navegando desde la angustia del personal. Mirar hacia atrás es descubrir una terrible verdad, y es que al igual que un hámster en su jaula llevamos un decenio dando vueltas en nuestra ruedecilla metálica creyendo que avanzábamos hacia algún lugar, cuando en realidad, no nos hemos movido ni un ápice del punto de partida, siendo ésta una institución enclaustrada en una década de huidas hacia adelante queriendo evitar el cierre con tal atino que cada paso dado hacia la escapada le llevó a hundirse todavía más en su miseria.

Aquello, con ligas y dobletes en el bolsillo, ya era una ruina a 30 millones de pérdidas por curso, con causas de disolución saldadas con operaciones sospechosas como la de Murcia Puchades - tiempos en los que se vendían esquinas de Mestalla para trampear cuentas -, yendo a velocidad de crucero a buscarle los ladrillos a la familia Soler para evitar una catástrofe que ya se antojaba inevitable. Son diez años en los que el aficionado ha pasado de dividirse entre aimaristas y antiaimaristas a hacerlo entre KPMGistas y PriceWaterhousistas, de adular los quiebros de Vicente a idolatrar a empresarios con la vida resuelta; hace tanto que no se aplauden triunfos que ahora, alguno, hasta vitorea presupuestos. La efeméride, cabrona como una viuda negra, hizo coincidir el aniversario de la mejor temporada en 33 años con la peor liga desde el regreso a primera en 1987. Un lapso de tiempo en el que hemos recorrido un siglo de valencianismo con un inicio y un final invertidos a modo de castigo burlón.

Son dos quinquenios sosteniendo un club improvisado en aras de un futuro que nunca acaba de llegar... 'ahora, cuando esté el campo acabado...'; 'cuando se vendan las parcelas...'; 'aquello para cuando llegue el nuevo presidente...'; 'eso lo dejamos para dentro de cinco temporadas, cuando dé frutos nuestro plan...'; 'hasta que vendan el club...'; son demasiados veranos de revoluciones salvajes, de plantillas improvisadas y planificaciones iniciadas en agosto donde jamás se tuvo en cuenta la vertiente deportiva, lastrada por las necesidades y los fallidos planes del ladrillo. En un viraje psicótico del relato hemos ocupado nuestro tiempo hablando de maquetas, recalificaciones, quitas y planes de viabilidad; de demandas y agrupaciones vecinales; de sueldos de presidentes más que de renovaciones de jugadores; el militante ha mutado en silencio de hincha barrigón a consultor financiero que discute de planes de refinanciación y de comisiones gestoras, porque la suya, ya es una militancia mercantilizada en la que dejó de llenar tribunas para aplaudir fichajes a hacerlo para sacar cartulinas. Alguno incluso podría afirmar que "de pura desesperación nos enseñaron un powerpoint y sentimos ganar la Champions".

La del VCF no deja de ser una realidad terrible. Alcanzando la muerte por inanición sólo ha conseguido reducir su deuda hasta los 360 millones, una cantidad impagable para unos ingresos de apenas 80; reduciendo su masa salarial de los 90 a los 58 millones sigue padeciendo un déficit estructural inabordable, y la caída de sus ingresos comerciales en estos años ya visten un -15. Y no es que el club no pueda contar con los 28 millones de la Champions, es que se ha quedado ya sin los 10 de la Europa League; y sus créditos vencidos, imposibles de devolver. Y con todo, todavía hay quien se opone a una venta. Eso sí, sin poner ellos ni euros ni soluciones; algo a lo que sorprendentemente también nos hemos acostumbrado hasta tolerarlo con naturalidad. Todo esto lo miramos con la ingenuidad de quien cree que este verano será distinto y no uno más de los muchos que han conformado este imperio en ruinas. Los calores del 2014 llegarán con más cambios, más inestabilidad - o con más improvisación -, con más sacudidas políticofinancieras y por décimo curso consecutivo con un nuevo 'empezar' con su toque de castrofismo que todos daremos por definitivo hasta nuevo aviso. Y todo llegará configurado por los mismos de siempre. Por una casta política que secuestró el club para manejarlo a su antojo, y que todavía hoy, bailando sobre su cadáver, se resiste a dejarlo marchar.

En plena borrachera sueca, en pleno corazón del Ullevi, imaginamos un futuro feliz al contar con un VCF que lo tenía todo al alcance de su mano para dar el gran salto y convertirse en una potencia universal. Pero nadie nos advirtió de que el futuro sería esto, ruina, politiqueo, sentimientos de alquiler y una venta asquerosa como broche final a una falla de guano que ha llevado a la SAD al límite de su existencia. Lejos de celebrar títulos como en aquel lejano 2004 ahora se celebran ofertas de compra; antojándose vital - de forma absurda - recauchutar el club de burgueses locales y valencianos de buena cuna, porque es sabido por todo el mundo que el crack del VCF fue provocado por empresarios chinos apoyados en exdirigentes del Catania.

Este club, al igual que Fede Cartabia, posee un don natural para elegir siempre la peor opción posible, y en esta ocasión no iba a ser menos, por eso ahora Vicente Vallés se dirige a las masas a modo de líder mesiánico mientras nos lo miramos con cara de pasmo, preguntándonos qué demonios ha pasado aquí para haber desperdiciado diez años en los que cada solución adoptada acabó por hundirnos todavía más.

Prisa cierra la refinanciación de su deuda por tercera vez en tres años

Por fin buenas y definitivas noticias para Prisa.  Cerberus , el inversor que más deuda impagada tenía del grupo, se ha sumado al acuerdo de refinanciación que la compañía de medios de comunicación alcanzó la semana pasada con sus cuatro grandes acreedores -Santander, Caixabank, Bankia y HSBC-. El visto bueno del fondo de distress permite salvar el último escollo para alargar por tercera vez en tres años el pago de la abultada deuda del holding de los Polanco y las firmas incluidas en Liberty.

Saryon escribió:
Leer más:  Prisa cierra la refinanciación de su deuda por tercera vez en tres años - Noticias de Comunicación  http://bit.ly/1v3xjBL

Sagan escribió:Sin ataduras :?:

tronecillillon escribió: ¿De Camboya?

Kirtash escribió:Morata sua la camiseta més que alguns jugadors jajajaja